Cuando ya no se hace el amor
con el cuerpo... pero si con el alma...
Cuando la caricia traspasa
más allá del sentimiento.
Cuando una palabra, una sola,
resume todos los te amos...
y en una mirada se asoman
los años de amor ofrendados...
Cuando el estrechar las manos
se convierte en símbolo de unión total,
y el entendimiento no necesita
en absoluto de palabras.
Cuando el significado de comprensión
se troca en dos personas,
cuyas vidas entrelazadas
son ya para siempre una sola.
Cuando se sabe con certeza,
que cada día se acerca más
aquella cuya fría mano
será la única que podrá separarlos.
Ante esa inminencia
el amor puro y forjado
a través de los años
se hace aun más poderoso.
Cuando todo eso y mucho más
entre dos amantes sucede,
es cuando en la vida, al fin...
se ha conocido al amor verdadero.
"No existe un día para celebrar el amor... se le celebra todos los días".