Me abandonaste

Me abandonaste...
y todo es ahora diferente,
me creí dueño de tu amor
pero era sólo un engaño.

Con tres palabras apenas,
como dardos envenenados
que enviaste directo a mi corazón,
quedó todo arrasado.

Más la huella de tu cariño,
el recuerdo de lo nuestro
marcado a fuego lo llevo...
y te pienso aunque no quiera.

Yo que vivía de por sí
esta vida complicada,
debo ahora echar a cuestas
un dolor y una pena adicionales.

Fue tan fácil... el decir lo que dijiste,
sin pensarlo o demasiado bien pensado;
que aún estoy digiriendo
el terrible resultado.

Pero debo comprender
enmedio de esta desdicha,
que así como empieza,
también termina lo más bello.

Me pregunto si es justa la vida,
si al estar más que caído
se nos viene encima
con venenos y tristezas...

Me abandonaste...
Y parece que todo sigue igual
No era el dueño de tu amor
y caí por mí mismo en el engaño.