Tienes en ti, dos tesoros maravillosos
uno que cautiva los sentidos
y otro que conquista al corazón.
En aquel que maravilla por fuera,
es tu rostro, es tu sonrisa,
el donaire de tu cuerpo y tu voz.
En ese que domina el sentimiento,
es tu carácter, tu dulzura,
tu pasión, el encanto de tu alma.
Dos tesoros, tus bellezas,
que se acoplan, que se unen,
para hacer de tí, única y especial.
Y tengo la dicha, la alegría,
de poder sentirme deslumbrado
por dentro y por fuera.
La tersura de una rosa
y el frescor de primavera
sobre tu piel y en tu mirada.
La profunda generosidad
de una caricia y la paz delicada
en tu espíritu y tu esencia.